En general, las pocas descripciones que han llegado hasta nuestros días apuntan a que en realidad, el harpastum es más parecido al actual rugby que al futbol. En todas las temporadas desde la 2000-2001 hasta la 2007-2008 (salvo en la 2003-2004), como mínimo la mitad de los equipos de Primera División estuvieron patrocinados por instituciones públicas (a través de distintas fórmulas), cajas de ahorro o empresas ligadas al sector inmobiliario.