La cabeza del rollo de barba consta de 540 agujas de titanio (0,5 mm), que durante su uso provocan microlesiones en la piel y los folículos. “Hasta hace dos años no lo notaba porque vivía en una ciudad con un clima muy húmedo, pero la empresa me trasladó al interior y empezó a ser insoportable; había días que tenía tanta sequedad que a duras penas podía trabajar delante del ordenador y en verano a veces evitaba salir de casa”.